sábado, 25 de junio de 2011

Humilde amiga.

Mirar poéticamente a los utensilios sencillos de la vida diaria, puede ser un ejercicio de superación. En este poema lo he intentado. No sé si lo conseguí. Lo dejo a tu criterio.


1 comentario:

  1. Me gusta tu merecida oda a la silla.Fíjate la seguridad que aporta...
    Una gran idea, Aborojuan.

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