martes, 31 de julio de 2012

Indomable creatividad


INDOMABLE CREATIVIDAD

Vivir y crear; crear y vivir                                       
Pintar, crear, escribir.

La mano, misteriosa, se abre a lo imposible;
los latidos se adueñan de su muñeca
provocando una lluvia de esencias
y sonidos romos.                                         
Romos y sordos; sordos y claros;
claros y  pardos; pardos y romos.

Condenados al exilio,
destierran su coloreada voz que se precipita
por las laderas de la duda.
Montaña en erupción:
lava, traza y palabra
indagan los oscuros rincones de lo nuevo.

Incansable oleaje de agotador vaivén,
chirriante gozne
de idas y venidas soñadoras,
embriagadas de celo y pulcro sexo
fecundan al futuro en sus ventanas.

La obra, desnuda, vitalista
se amanece en su pureza transparente.                                         
Satisfacción, reposo.          

          Pintura de Matisse
Versos de Aborojuan, julio veinte doce                   


   

El daño de la ausencia












EL DAÑO DE LA  AUSENCIA

No tengo ganas de hacer el amor                                    
ni tengo el amor de hacer ganas.
Tampoco tengo ganas de hacer ganas.

Marchó,
sufrí.
Se fue,
dolor.
No tengo.
No está.
No estoy. No soy.

Quizás vuelvan mañana
las ganas de tener.
Quizás, sólo quizás, si acaso él vuelve.

Quien seguro no vuelve
es el tiempo transcurrido.
El tiempo nunca anda hacia atrás.
El dolor, los vientos, la lágrima y los pájaros, tampoco
Pero el perdón, sí.                                                                        
Nuestras manos, huecas, siguen llenas de esperanza.
¡Ven!                                                  

Versos de  Aborojuan, julio veinte doce.

sábado, 21 de julio de 2012

Taragüi



         

         TARAGÜI
Quién podrá hablarnos de los pies del fuego.
Quien del llanto de la montaña
o del corazón del río
o del lamento de las lunas llenas.

¿Hacia qué destino caminan tus raíces?

Sólo sabemos de la fragua de tu bronce
sólo de la piel de tu choza,
de tus sensuales dunas
y de tus curvadas planicies
donde reposa la herencia de tus antepasados.

¿Quién mejor que tú? podrá contarnos.
¿Quién mejor? india Taragüi.

Sin huellas de sonidos ni grafías,
en la seriedad de tu sonrisa,
en el silencio de tu mirada,
se cobijan las respuestas de las preguntas eternas.

A ellos - praderas desoladas – los expulsaron
con sus arcos humillados y sus flechas deshonradas.

Tú, indígena y permanente,
vivo ejemplo de la tribu guaraní
inmortalizada quedas para asombro de los ojos del futuro.                           

Aborojuan, julio del año veinte doce.


Baño de Luna Llena


                                     BAÑO DE LUNA LLENA
Sobresales de los fondos oscuros
del lago de las verdades.
El grito ascendente y luminoso
hace temblar los miedos de las nubes.
Tus sedosos contornos,
ocultos a nuestro apetito
por tus brazos guerreros,
te tornan más india, más misterio.
Escúchame Baño de Luna Llena:
llenas de pálpitos
nuestras costumbres ciertas
mientras agua y cielo,
en honor a tu condición femenina,
se han vestido de violeta.
La larga cabellera, fiel a tus orígenes,
funde su negrura                                               
junto al asombro de nuestras pupilas.                 
Raza y belleza                                                    
sincronizados en tu cuerpo de mujer.                

Cuadro de Mirta Leyes

Versos de Aborojuan, julio veinte doce.




miércoles, 11 de julio de 2012

Festival de naranjos estivales


FESTIVAL DE NARANJOS ESTIVALES

Con sus brazos de par en par,
cobijo de cansados y amoríos
silla para unos, lienzo para otros,
el árbol generoso cede su presencia
proyectando su silueta espesa y silenciosa.

Jóvenes amantes,
en la falda rugosa que cubre su leñosa desnudez,
posan iniciales con ritos apasionados
compartiendo armonía, pálpito y reposo.

El estío, suspirando su calor,
ha tornado el herbáceo verdor en pastizal
y descansa amarillento es sus laderas.                   
La paz está servida. Fértil agosto.   
Óleo del valenciano Antonio Martínez Hinojosa

                 Versos de Aborojuan, julio veinte doce.



¡Perdóname!


       ¡PERDÓNAME!

Viví en tu corazón, coral remoto,
el mío sigue preso de tus redes;
pescaste mi pasión, con tu ancla puedes
anillarlo a tus olas, dulce loto.

Despierta en mí el recuerdo, rezo y voto,
esclavo del ayer y a sus mercedes
hoy trepo como vid por tus paredes
penando por las savias de tu coto.

Embriaguen tus lunares nuestro cielo
regresen tus caricias a mi vuelo
ausente del sabor de tu melena.

Perdóname mujer si fui cadena
levante ala de halcón esta condena
y torne calidez mi desconsuelo.

                     Aborojuan, julio veinte doce.



Titilaciones


     “TITILACIONES”

La noche se ha vestido con estrellas,
reflejos de sonetos con sus luces
titilan mis latidos andaluces,
¡oh rima! graba en mí tus hondas huellas.

Donjuanes que cartean a doncellas,
piropos en las mechas de arcabuces
lanzados al naufragio, senda y cruces,
los mares donde flotan sus botellas.

Amiga de la pluma a cielo abierto
me canta melodiosas soledades,
caricias del violín de su concierto.

Bautízame tenor de tus bondades,
empapa el arenal de mi desierto,
regálame el cairel de tus verdades.
           
                          Aborojuan, julio dos mil doce.




Hayku


Hija del sol


HIJA DEL SOL

Tu padre se posó sobre tu piel,
hija del sol.

Las armas milenarias de tu pueblo
reclaman la herencia de la memoria.

Arco tensado de esperanza,
flecha, cargada de valores,
plumas, diademas y belleza,
volarán por la conciencia de las razas.
El centro de la diana, herido de verdad,
sangrará la justicia necesaria.

El pueblo guaraní:
mujer, aire, noche, hombre, pradera, cabaña.
El pueblo guaraní:
sol, río, fuego, alimento, montaña, caballo,
El pueblo guaraní:
canto, danza, rito, hechizo, subsistencia
-auténticos cauces de armonía-
sabe que bajo las cenizas de sus muertos
vive, todo es uno,                                                                                   
la esencia indivisible del respeto.                                                        

Óleo y título de Mirta Leyes.    Versos de Aborojuan, julio veinte doce.






La raza permanece


LA RAZA PERMANECE

Pariendo está y su grito
anuncia nueva vida.

Dilata y se contrae sobre largos cabellos,
senderos de serpientes sinuosas,
donde oculta sus garras el destino
que hiere inútilmente
su pluma y su pradera milenaria.

Frondoso es este bosque de futuros
mordido por las llagas del pasado.

El ámbar de la senda es el testigo,
el pecho de la hembra y su alarido
reciben al piel roja deseado.

                       Aborojuan, julio del veinte doce.


Abundancia


 ABUNDANCIA

Aullido de sufridas injusticias
lanzado en vertical al infinito
incendia los designios de los cielos
liberando la crepuscular angustia de la raza.

En la amplitud del pecho generoso
se insufla el grito renovado.
Catapulta de la ira del recuerdo
araña y muerde el más allá del genocidio.

Ella es la flor de la abundancia:
sus pechos, fecundos, repletos de savia,
rebosantes de rabia y exhuberancia
derraman en su cauce la miel de los deseos.

Como lava incandescente que todo lo cubre,
se purifican los halos de su estirpe.
                     Piel roja en roja piel envuelta en llamas. 

                                                      Aborojuan, julio 2012